Páginas

domingo, 12 de abril de 2015

Lo siento.

Siento ser así a veces. Siento comportarme como lo hago y decir cosas hirientes cuando no debería. Siento estar enfadada por cualquier comentario y alejarme cuando es obvio que que a quien necesito es a ti.

No soy una persona fácil, lo sé, pero dentro de mi dificultad hay una persona que te quiere con locura, que piensa en ti en todo momento y que se enfada por guardarse cosas que realmente quiere decir. Te entiendo mejor de lo que crees pero soy cabezota al igual que tú.
Aun así, aunque nuestras peleas sean cada vez peores, te sigo y te seguiré queriendo siempre. Cuando después estamos bien, me dices esas cosas que me ponen el vello de punta y haces que me recorran escalofríos por todo el cuerpo, cuando me susurras canciones de amor y me dices que me quieres entre beso y beso, cuando me despiertas con cariño y me das las buenas noches con dulzura y un abrazo, cuando haces eso es cuando me doy cuenta de que las riñas que tenemos son solo eso, y que nuestra esencia está en los pequeños detalles del día a día, en el preocuparse por el otro aunque uno tenga un día incluso peor y en que seamos lo primero que vemos al despertarnos y al irnos a dormir. 
Eres lo que más he querido en toda mi vida, y no me importa si a veces tenemos días malos, para mí solo contarán los días buenos.




Sleep with me.


No hay nada mejor en el mundo que dormir abrazada a él. Quedarme dormida mientras le siento pegado a mi espalda, las piernas enredadas en las mías, acariciándonos, queriéndonos. Notar como poco a poco se deja vencer por el sueño y sentir su respiración calmada y rítmica, suave y lenta, contra mi pelo, haciéndome cosquillas en la nuca, sintiendo su mejilla en mi cabeza.
Adorar el tacto de sus brazos rodeando mi cintura y sus manos cogiendo las mías, acariciando casi sin darse cuenta mi piel, muy despacio, como una nana silenciosa que hace que me duerma más me feliz que nunca, junto a él. Porque le quiero pegado a mí siempre, sentir su calor y su amor todas las noches del resto de mi vida.

Stranger.

Ves a esa persona por la calle, esa persona que en su día, hace lo que parece que fueron mil años, fue especial para ti, muy especial para ti. Te mira, le miras y como desconocidos alzáis la cabeza y esbozáis una sonrisa pequeña y forzada para saludarla y ambos seguís vuestro camino. Pero por dentro sabes exactamente lo que pasa por su cabeza y esa persona sabe lo que pasa por la tuya como si viviera dentro de ella. Ambos sabéis que es lo que pasa por la cabeza del otro como si fueran la misma persona.



27.


Hola de nuevo.

Sé que no he escrito en meses, que he perdido un poco la costumbre de escribir lo que siento y de buscar cosas que me definan y con las que me siento identificada. En apenas un año mi vida ha dado un giro brutal y con ello ha cambiado mi personalidad y mi forma de ver el mundo.
 Cuando ahora miro este blog y todo lo que he escrito pienso en lo cursi que he sido siempre, cursi, pastelosa e inocente. He confiado en mucha gente y todos me han fallado de distinta manera así que veo estos textos como la prueba de que me creo demasiado rápido lo que los demás me dicen.
 Creo que ya no escribo porque no expreso lo que siento, ahora me lo guardo todo dentro y sé que tarde o temprano estallará. Por eso he decidido volver. Espero que volver a escribir me venga bien y me ayude a asentar mi cabeza y mis sentimientos, intentaré volver a darle vida a este blog porque si en algún momento fui capaz de escribir textos preciosos quiero volver a leer algo mío y quedarme alucinada porque esas palabras han salido de mí.
 Ya no estoy enamorada y tengo pensamientos menos bonitos así que no prometo textos como los de antaño, solo textos que salgan de mí.
 Siempre he visto este blog como mi pequeño diario y espero que siga siéndolo un poco más.
 Gracias a todos los que han dedicado un segundo de su tiempo a leer mis palabras y a ver todo lo que creo en esta página. Muchas gracias a todos.